Pájaros (Una experienca de presencia plena)
Sentada en mi oficina me sorprende un destello en la mente que me trae al instante presente algo planificado y olvidado. Paro. Por la ventana veo las plantas de mi vecina, Elenita, bailando vigorosamente al ritmo del fuerte viento. Recuerdo que dejé secando en el parque unas mantas que rescaté limpiando unos cajones donde guardo todo lo que queda tirado (recomiendo tener de esos cajones y chequearlos -claro- cada 6 meses). Donde vivo el viento se pone bravo y se lleva lo que encuentra suelto. Ya llevo perdidos el banco del muelle, dos remos, una cama elástica y casi casi un kayak. Me tomo el último sorbito de mate (es importante hacerlo si no querés tomarte el trago frío y desagradable al volver) y voy al rescate de mis mantas. Abro la puerta de la galería y ahí estaba. Un sonido lleno de sonoridades se agolpó en mis oídos. Paro. Escucho. ¿Cuántos pájaros diferentes cantan esta mañana de cielo liso? ¿Qué comunican de esta manera tan agradable? ¿Algún trino se impone? ¿Cómo repercute ...